Los analistas de los medios más serios de Estados Unidos coinciden en que el primer debate entre Kamala Harris y Donald Trump lo ganó ella: la demócrata lo obligó a ponerse a la defensiva y a decir mentiras tales como que «los inmigrantes haitianos en la ciudad de Springfield estaban secuestrando y comiéndose las mascotas de sus vecinos» o discutir cuál de los dos llevaba más gente a sus concentraciones.
En los 90 minutos que duró el encuentro, Harris descolocó al expresidente con ataques que lo desviaron de su estrategia y elevaron la temperatura de la contienda, al extremo de que Trump se vio en la necesidad de ponerse a la defensiva.
Harris recordó la conducta de Trump durante los disturbios en el Capitolio, mencionó la lista de funcionarios que sirvieron en la administración de Trump y se han convertido en críticos a su candidatura y recordó sus días como fiscal cuando le tocó defender a mujeres abusadas o violadas, todo lo que hizo lucir a Trump en desventaja casi desde el inicio del debate.
«Si había dudas sobre la capacidad de Harris para capear lo que será una racha brutal, al menos se disiparon parcialmente con su actuación aguda y constante el martes… Trump no estaba preparado para esta Harris. Anteriormente, la había menospreciado personalmente, cuestionando su inteligencia y su identidad. Cuando se vio acorralado en el debate, utilizó el tema de la inmigración como su muleta para contraatacar, pero también se lanzó a numerosos vuelos de fantasía y mentiras descaradas, sin éxito», publicó The Washington Post.
Tan mal se debe haber sentido Trump luego del encuentro con Harris, que se vio obligado a dar una conferencia de prensa después del debate, una rareza que buscaba demostrar a los periodistas lo que no había logrado hacer en el escenario del debate.
Dado lo reñida que está la contienda entre los dos, parece apostar a sus leales votantes para ganar en noviembre.
Y si bien la ganadora del debate fue Kamala Harris, eso no garantiza su triunfo en las elecciones de noviembre.
Aunque aún es muy temprano para pronosticar cuántos votos le sumará a la demócrata el apoyo que le dio la superestrella Taylor Swift, quien posteó justo después del debate «votaré por Kamala Harris y Tim Walz en las elecciones presidenciales de 2024», dijo en Instagram para sus más de 283 millones de seguidores.
«Voto por Kamala Harris porque lucha por los derechos y las causas que creo que necesitan un guerrero que los defienda. Creo que es una líder talentosa y de mano firme y que podemos lograr mucho más en este país si nos guiamos por la calma y no por el caos».
El Cooperante