Quien fuera quizás el ministro más breve en la cartera de Industrias y Producción Nacional, Pedro Tellechea, fue arrestado de sábado para domingo, por funcionarios de la Dirección de Inteligencia Militar (Dgcim). A su casa lo fueron a buscar.
Así lo publica en su twitter el fotoreportero Jesús Medina Ezaine, quien recientemente se marchó del país, después de estar detenido un tiempo en los calabozos del Helicoide.
Pedro Tellechea, quien venía presuntamente de hacer una destellante y fulgurante carrera en el ministerio de Energía y Petróleos desde marzo del 2023, fue designado el 27 de agosto de este año como ministro de Industria y Producción Nacional. Por cierto, no tuvo tiempo de visitar las empresas de Guayana.
Esto ocurrió, su salida del ministerio de Energía, luego que la vicepresidenta de la república, Delcy Rodríguez fuese designada por el Jefe de Estado, Nicolás Maduro, como responsable del área energética y petrolera.
El viernes Tellechea renunció alegando problemas de salud que le impedían continuar al frente de tan importante cartera. Pero ese no habría sido el problema de fondo.
Al parecer Tellechea también sufrió la «maldición El Aissami», casualmente en circunstancias muy parecidas debido a que vuelven las sanciones para Venezuela, a solicitud de los amigos de oposición y de una fracción del partido republicano, encabezado por ese prócer cubano llamado Marcos Rubio.
La otra versión que se maneja extraoficialmente es que el ministro de Interior y Justicia, Diosdado Cabello Rondón, realizó un trabajo de investigación e inteligencia y el gobierno, gracias a eso determinó que varios ministros, entre esos Tellechea, se habían «cuadrado» con la «líder indiscutible» de la oposición, María Corina Machado.
Otro de los detenidos en este mismo barco, figuradamente, de Tellechea, es un empresario de nombre César Omaña, presuntamente financista principal del golpe de la «mara de plátano», ocurrido el 30 de abril del 2019, aquel donde aparecían en el elevado de Altamira, el descendiente de Simón Bolívar, Leopoldo López y su amanuense, Juan Guaidó.
Omaña es una persona vinculada con el gobierno de Maduro y aunque se sabían sus conexiones con la operación de la «mara de plátano», entraba y salía del país sin inconvenientes.
Y es que al parecer formaba parte de la línea de informantes que manejaba Hernández Dala, jefe del Dgcim hasta la semana pasada cuando Maduro realizó cambios en el alto mando militar y de la seguridad en Venezuela.
Al parecer a Omaña le dieron un golpe para que hablara y veinte para que se callara porque no sólo contó algunas cosas, sino que además se conoció que financiaba a periodistas en el exterior, como es el caso del jefe de prensa de María Corina Machado, Orlando Avendaño, director de un medio digital en el extranjero.
La información fue hecha pública a través de las redes sociales de Indira Urbaneja, conocida analista política con un canal en Telegram donde da a conocer no sólo su opinión sobre el acontecer nacional e internacional, sino también sobre los políticos de oposición.
Omaña está detenido desde el pasado 30 de julio de este año.
Carmen Carrillo
