La provincia de Valencia despertó este miércoles tras una noche de pesadilla a la espera de conocer la magnitud definitiva de la devastación provocada por el temporal que se desató el martes, una dana de efectos explosivos que se cuenta ya entre las peores catástrofes naturales registradas en la historia moderna en España.
Hay al menos 95 muertos (entre ellos, cuatro niños), decenas de desaparecidos, conductores que pasaron horas aislados, vecinos encaramados en los pisos superiores de sus viviendas, miles de personas que no pudieron volver anoche a sus casas, coches apilados, pueblos anegados y líneas ferroviarias y carreteras cortadas.
A última hora de la tarde del miércoles, 115.000 personas seguían sin suministro eléctrico y algo menos de 120.000 estaban aún sin conexión de telecomunicaciones. El Gobierno ha activado un gabinete de crisis en La Moncloa y ha declarado tres días de luto oficial.
La gota fría ha afectado principalmente a la provincia de Valencia pero sus efectos han alcanzado a otras: en Mira (Cuenca) ha fallecido una mujer de 88 años tras el desbordamiento de un río, y en Letur (Albacete) ha sido hallado el cuerpo sin vida de otra mujer y se busca a cinco personas desaparecidas.
También ha muerto un hombre de 71 años y nacionalidad británica que había sido rescatado en Alhaurín de la Torre (Málaga), donde las lluvias fueron intensas el martes, que falleció de un infarto mientras era trasladado al hospital.
El tráfico ferroviario de alta velocidad entre Madrid y Valencia está cortado, al igual que la circulación por tren entre Valencia y Barcelona, y así permanecerá, al menos, durante todo el día de hoy (en el caso del AVE, hasta el lunes como mínimo).
A las 22.00 horas de este miércoles, la guardia civil confirmó la identidad de dos cadáveres hallados por la mañana en Paiporta, los de Lourdes María García, de 34, y su bebé, una niña de tres meses.
Este jueves, la dana seguirá perdiendo intensidad, aunque todavía mantiene bajo aviso amarillo, el mínimo de una escala de tres, a cinco comunidades y a Ceuta.
Se trata de Andalucía, Castilla y León, Cataluña, Extremadura y, de nuevo, Comunidad Valenciana, epicentro del desastre. Se esperan lluvias abundantes, aunque ya no torrenciales, lo que complicará las labores de búsqueda de personas y de reconstrucción de las infraestructuras.
La dana continuará situada al oeste de la Península, por lo que la mayor probabilidad de precipitaciones se concentra en la vertiente atlántica sur y en el área del Estrecho.
Tanto el jueves como el viernes, detalla Rubén del Campo, portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), “habrá tormentas de nuevo en el sur de Cataluña, localmente intensas y otra vez lluvias abundantes en Extremadura y Andalucía occidental, pero nada que ver con lo visto el martes en el área mediterránea”.
Según las previsiones emitidas por el gabinete de crisis del Gobierno, se espera que “la zona más delicada sea el sur de Tarragona y el norte de Castellón, con tormentas que persistirán estacionarias sobre las mismas zonas y pueden dejar acumulaciones importantes”.
Se prevé que “la otra zona activa sea Extremadura y Andalucía occidental, siendo más intensas y acompañadas de tormenta en la provincia de Huelva”.
El País de España