Carmen Carrillo/CNP 4.568
Ya han pasado cuatro meses de las elecciones presidenciales del 28J y todavía los venezolanos no hemos visto, el resultado electoral, municipio por municipio y estado por estado, como siempre se ha hecho en el país, aún con un CNE cuyos rectores tienen menos credibilidad que la justicia en América Latina.
El gobierno llevó hasta la sede del Tribunal Supremo de Justicia un cajero o un poco de cajas para ser más específica que hizo acordar de las Memorias y Cuentas que presentó en alguna ocasión el abuelo gobernador y eterno candidato de la Causa R en Bolívar, Andrés Velásquez, cuyas primeras páginas tenían algunas cosas escritas pero luego se veía que eran solo páginas en blanco.
Y María Corina quien no era candidata presentó una “página web” donde presuntamente había “actas” con resultados “reales”.
Incluso actuando como James Bond, con Daniel Craig como protagonista, dijo que “logramos sacar las actas y llevarlas hasta los organismos internacionales”.
Pero, (suena al fondo la Quinta Sinfonía de Beethoven), no se conocen los resultados. Se sabe sí, que los poquitos testigos de mesa que tuvo a bien colocar esa genio de la política llamada María Corina Machado, tienen sus actas enmarcadas en las salas de su casas como trofeo.
Bueno, imagínense ustedes si trabajó gente poco seria, que en vez de llevar eso al CNE y reclamar, lo exhiben como si se hubieran ganado un concurso.
Ese era el equipo “patria o muerte” de nuestra oposición, gente sin idea de donde estaba. Claro esa es la “sociedad civil” diría Maricori quien además agregaría, “hay que defender cada votico, cada papelito”, ah mayor ignorante, cuando esas máquinas no “botan papelitos”.
Ahora imagínense ustedes cómo estamos ante el mundo. Como unos verdaderos ignorantes gracias a la oposición y unos tramposos gracias al gobierno.
Ya no sé cuántos países más reconocen a Edmundo González como presidente de Venezuela y no sé con qué documentos, papeles, registros, resultados, pistas, llegan a esa conclusión. Los venezolanos no hemos visto nada, así que no sé cómo ellos lo han podido hacer.
Sólo puedo pensar que al ingeniero industrial Juan Guaidó lo apoyaban 60 naciones en el primer interinato. Y supongo que en eso mismo deben andar los artífices del segundo interinato.
China y Rusia salieron a felicitar a Nicolás Maduro, además de Daniel Ortega, pero ninguno de los jefes de Estado de estas dos naciones son precisamente un dechado de exhibición de acciones democráticas. Ellos tienen que hacerlo, Venezuela les debe mucha plata, además está el tema geopolítico.
El gobierno no ha podido terminar de construir el algoritmo que certifique ante el mundo que Maduro ganó las elecciones.
Y es que yo creo que el Psuv o Maduro aún no se recuperan del tequichazo que les dio el país al votar en su contra porque no fue que ganó Edmundo González. Perdió Maduro, que es distinto.
Si hubiesen puesto de candidato a un monigote ese le ganaba a Maduro porque los venezolanos nos hartamos de 25 años de gobierno con los mismos chivitos del almanaque, donde además viven haciendo enroques mientras desprecian el talento de los venezolanos que es inmenso, por cierto, por eso América Latina nos odia, somos súper trabajadores e inteligentes.
Bueno, cuando yo trabajo en una verdulería porque nadie me da empleo como periodista, debido a mi experiencia, pues tendría que entrar de jefa de periódico y no creo que eso sea posible en cualquier nación de América Latina.
Aunque nosotros sí no tenemos ese problema. En El Nacional trabajaron como subjefe del diario un argentino de nombre Jorge Cahue y como jefe de economía, otro argentino, Edgardo Silberkasten y no tuvieron problemas.
En Bolívar tuvimos un nefasto gobernador cuyo jefe de prensa era peruano y yo tuve muchos jefes de diagramación peruanos.
Puedo hablar bien de mis dos compañeros de trabajo, peruanos, porque no andaban echándole vaina a nadie. Trabajaban. Del otro no sé. Creo que era muy bueno hablando mal de los demás y su jefe también.
Mañana continuamos. No quiero aburrirlos.