La Policía Federal de Brasil formalizó este jueves cargos contra el expresidente Jair Bolsonaro y un total de 36 personas por su supuesta participación en un intento de golpe de Estado para «evitar la toma de posesión» del actual presidente, Luiz Inácio Lula da Silva, tras su victoria en las elecciones de 2022.
La Policía Federal de Brasil anunció que cerró una investigación que revela la existencia de una «organización criminal» que operó de manera coordinada en un intento de mantener al entonces presidente en el poder durante el año 2022.
El informe final de esta pesquisa ha sido enviado al Tribunal Supremo Federal (STF), donde se imputan a 37 personas por los delitos de abolición violenta del Estado Democrático de Derecho, golpe de Estado y organización criminal.
La investigación, que se llevó a cabo durante casi dos años, se sustentó en evidencias recolectadas a través de diversas técnicas, incluidas violaciones del secreto telemático, telefónico, y bancario, además de registros, incautaciones y acuerdos de fiscalía, todas medidas debidamente autorizadas por el Poder Judicial.
El análisis de las pruebas permitió a los investigadores identificar grupos específicos dentro de la organización, tales como un «Centro de Desinformación y Ataques al Sistema Electoral», una «Unidad Encargada de Incitar al Personal Militar a Participar en Golpes de Estado», y otros centros operativos diseñados para apoyar acciones golpistas.
Entre las personas señaladas se encuentran el general en la reserva Walter Braga Netto, quien fue ministro de la Presidencia y de Defensa, además de ser el candidato a vicepresidente acompañado de Bolsonaro en las elecciones de 2022. También se menciona a Almir Garnier Santos, excomandante de la Marina, en la lista de acusados.
Cabe recordar que Lula obtuvo una victoria estrecha en las elecciones de octubre de 2022 ante Bolsonaro, quien nunca admitió su derrota, lo que desató una serie de incidentes destinados a frustrar la investidura del nuevo presidente, la cual finalmente se llevó a cabo el 1 de enero de 2023.
Durante los meses posteriores a la elección, se registraron bloqueos en carreteras por parte de camioneros, manifestaciones en las que se pedía una «intervención militar» y disturbios en Brasilia, incluyendo un intento de atentado con explosivos contra un camión cisterna cerca del aeropuerto de la capital.
El Cooperante