Jesús Rafael Álvarez (44), preso político fallecido bajo custodia del Estado, fue detenido en su casa en El Callao, estado Bolívar el pasado 2 de agosto.
Funcionarios de los organismos de seguridad del Estado, presuntamente del Dgcim, ingresaron a su residencia y se lo llevaron a él, a su esposa y a dos de sus hijos, uno adolescente y otro de 7 años.
Este viernes el cuerpo sin vida de Álvarez fue trasladado a Anaco, estado Anzoátegui.
En la nota que publica el diario El Nacional, se expresa que una carroza fúnebre partió desde la morgue de Valencia, donde permaneció el cadáver tras realizarse una autopsia cuyos resultados aún no se han divulgado.
El joven Jesús Alejandro Álvarez Suárez (22), hijo del fallecido y de Anny Suárez, también detenida por motivos políticos, encabezó el proceso para la entrega del cuerpo.
Luego de más de seis horas de trámites en la sede del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (CICPC) en Tocuyito, logró salir custodiado por funcionarios junto a familiares que lo acompañaron hasta la morgue.
Sin embargo, las circunstancias del deceso de su padre siguen rodeadas de hermetismo.
En declaraciones al diario El Carabobeño, el joven expresó su desesperación por la situación de sus padres.
“A él me lo entregaron muerto, no quiero que ocurra lo mismo con ella. Quiero que me la entreguen mientras esté viva”, afirmó, refiriéndose a Anny Suárez, recluida en un centro de detención en Puerto La Cruz.
