Foto: @SalvoCernuzio.- Tras el entierro del papa Francisco, el Vaticano entra en una fase decisiva de preparativos para el próximo cónclave que elegirá al 267º sucesor de San Pedro.
Los cardenales electores, reunidos en Congregaciones Generales, volverán a encontrarse este lunes a las 9 de la mañana en el Vaticano para avanzar en las deliberaciones que definirán el futuro de la Iglesia, según confirmó este domingo la Oficina de Prensa de la Santa Sede.
Durante los primeros encuentros, el foco estuvo puesto en cuestiones organizativas posteriores al fallecimiento de Francisco, aunque también se registraron más de 70 intervenciones de los purpurados.
Ahora, la atención se centra en fijar la fecha de inicio del cónclave, que, conforme a las normas vigentes, debe comenzar dentro de los 20 días posteriores a la muerte del pontífice, es decir, antes del 10 de mayo.
Se estima que 135 cardenales electores participarán del proceso, una cifra que podría complicar el ritmo de las votaciones, dado que muchos no se conocen entre sí.
El quórum necesario es actualmente de 90 votos, aunque podría ajustarse si hubiera alguna ausencia de última hora.
Sobre la duración del cónclave no hay certezas: mientras algunos pronostican un proceso rápido, otros prevén negociaciones más prolongadas.
Un punto adicional de interés es la posible participación del cardenal Giovanni Angelo Becciu, quien, pese a sus controversias judiciales pasadas, insiste en su derecho a votar y a ser considerado como papabile.
Sin embargo, fuentes vaticanas señalan que sus aspiraciones podrían ser poco realistas.
Homenaje a Francisco en Santa María la Mayor
En paralelo a las reuniones administrativas, este domingo los cardenales llevaron a cabo una emotiva procesión hasta la Basílica de Santa María la Mayor para rendir homenaje al Papa Francisco.
Más de 20.000 personas, según datos oficiales, formaron largas filas desde primeras horas de la mañana para visitar la tumba del pontífice, ubicada bajo una sencilla lápida de mármol.
Durante la ceremonia, los cardenales rezaron las Segundas Vísperas, presididas por el cardenal Rolandas Makrickas, en un ambiente de recogimiento y oración.
El momento culminante fue la visita de la «señora de las flores amarillas», Carmelina Mancuso, una fiel seguidora a quien el propio Francisco dedicó palabras afectuosas durante su última estancia hospitalaria.
Conmovida hasta las lágrimas, Mancuso depositó su ramo de flores amarillas junto a la tumba.
La procesión fue acompañada por cánticos, oraciones en distintos idiomas y un ambiente de profunda devoción, mientras los fieles no dejaban de fotografiar y grabar cada instante.
La Basílica permanecerá abierta hasta las 22:00 horas para que todos los que deseen puedan despedirse del líder de la Iglesia católica.
Este lunes, los cardenales volverán a reunirse en el Vaticano, donde se espera que empiecen a perfilarse los nombres más firmes para el próximo pontífice.
El ambiente entre ellos ha sido calificado como «excelente y amigable», aunque la tarea que enfrentan es, como siempre, de suma gravedad e importancia para la Iglesia.
El Cooperante
