El Gobierno de Ecuador denunció este martes una «tentativa de asesinato» contra el presidente Daniel Noboa, luego de que su caravana presidencial fuera atacada con disparos y proyectiles en la provincia de Cañar, al sur del país.
De acuerdo con una publicación en X, el suceso ocurrió en la mañana en el cantón El Tambo, donde el mandatario se dirigía para llevar a cabo una serie de eventos de entrega y supervisión de obras de alcantarillado y bonos para la comunidad.
La Presidencia señaló que, a pesar de los ataques de «desestabilizadores» que intentaron impedir la entrega de obras esenciales, el Gobierno “no se detendrá”.
“A pesar del ataque de un grupo a la caravana presidencial en Cañar, que se dirigía a anunciar la construcción de la planta de tratamiento en la provincia por USD 4.5 millones que beneficiará a 26.000 habitantes, a entregar el sistema de alcantarillado de Sigsihuayco de USD 891.000, y entregar el convenio de financiamiento para la construcción de sistema de alcantarillado de Quilloac por USD 815.000, los desestabilizadores no lograron detener al Gobierno Nacional”, compartió.
Detienen a cinco involucrados
Por su parte, la ministra de Ambiente y Energía, Inés Manzano, confirmó que un grupo de aproximadamente 500 personas atacó la caravana, provocando daños en los vehículos, incluyendo signos de impacto de bala en el auto presidencial.
Asimismo, Manzano acudió a la Fiscalía General del Estado en Quito para presentar la denuncia, asegurando que el ataque es un acto «simplemente criminal» que no quedará en la impunidad.
El Gobierno informó de la detención de cinco personas en flagrancia, quienes serán procesadas bajo los cargos de terrorismo e intento de asesinato. La ministra enfatizó que los responsables de los ataques van a ser sometidos a todo el peso de la ley.
El incidente ocurre en medio de las protestas lideradas por la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie) contra la reciente eliminación de los subsidios al diésel, lo que elevó su precio de $1,80 a $2,80 por galón.
Estas manifestaciones han generado cierres de vías y, según cifras oficiales y de derechos humanos, han dejado un indígena fallecido por balas y aproximadamente 150 heridos entre civiles, militares y policías.
El Cooperante