Una tensa sesión informativa en el Congreso de Estados Unidos terminó abruptamente cuando legisladores demócratas de la Cámara de Representantes abandonaron la sala, indignados por la ausencia de asesores legales que pudieran explicar la base jurídica de los recientes ataques militares ordenados por el presidente Donald Trump contra presuntos barcos narcotraficantes en el Caribe y el Pacífico.
La reunión, convocada por el Comité de Servicios Armados, contó con la presencia de funcionarios del Pentágono y del Estado Mayor Conjunto, pero no incluyó abogados, lo que generó frustración entre los congresistas.
“No hubo abogados y fue insatisfactorio”, declaró el representante Gil Cisneros (California) al medio Axios. Su colega Jason Crow (Colorado) agregó: “Me voy sin entender cómo y por qué llegan a la conclusión de que el uso de la fuerza legal es adecuado en este caso”.
Los legisladores han cuestionado durante meses la legalidad de los ataques, que han dejado al menos 57 muertos, y exigen pruebas concretas de que los objetivos eran efectivamente narcotraficantes.
La administración ha defendido las acciones como parte de una campaña contra “narcoterroristas”, especialmente en Venezuela, y ha invocado la autoridad constitucional del presidente para actuar sin autorización del Congreso.
Sin embargo, no ha presentado evidencia clara sobre la identidad de los blancos ni ha emitido una opinión legal formal, aunque prometió entregarla “en algún momento”.
La representante Sara Jacobs (California) señaló que los abogados fueron retirados de la reunión a última hora, mientras que Seth Moulton (Massachusetts) expresó su total descontento: “¿Me voy satisfecho? Absolutamente no”, refiere Axios.
Por su parte, la Casa Blanca respondió con dureza. La subsecretaria de prensa, Anna Kelly, acusó a los demócratas de “difundir afirmaciones falsas” para desviar la atención del cierre del gobierno, y defendió los ataques como parte de un esfuerzo por proteger a los ciudadanos estadounidenses.
“Es patético que a estos demócratas les preocupe más encubrir a narcotraficantes extranjeros e inmigrantes ilegales que pagar a los trabajadores federales”, afirmó Kelly en un comunicado enviado a Axios.
La exclusión de los senadores demócratas de otra sesión informativa celebrada el miércoles ha intensificado las tensiones. Mientras tanto, el presidente del Comité de Servicios Armados, Mike Rogers (republicano por Alabama), confirmó que se realizará una nueva reunión sobre el tema.
La polémica en torno a estos ataques militares, que involucran directamente a embarcaciones en aguas cercanas a Venezuela, continúa generando preocupación en el Congreso estadounidense, donde crecen las acusaciones de que la administración estaría incurriendo en ejecuciones extrajudiciales bajo el pretexto de combatir el narcotráfico.
El Ejército de Estados Unidos atacó otra embarcación que llevaba un supuesto cargamento de drogas por el Pacífico oriental.
El secretario del Departamento de Guerra norteamericano, Pete Hegseth, informó que el ataque, ordenado por el presidente Donald Trump, se concretó ayer miércoles y fueron asesinadas cuatro personas.
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